9/2/17

Grafología para la vida cotidiana [9-2-17]


Grafología para la vida cotidiana

¿Para qué le puede servir la Grafología a una persona común?

Supongamos que usted no es un Psicólogo a cargo de contratación de personal. Tampoco es un candidato a grafólogo profesional. Y supongamos que tampoco desea transformarse en un perito criminalístico que desea diagnosticar el nivel de peligrosidad de un infractor de la ley o la validez de documentos bancarios.

¿Podría ser Grafología de alguna utilidad para usted?

Digamos que la respuesta es, con algunas variaciones dependiendo del caso, absolutamente afirmativa.


Marketing Personal

Supongamos, por ejemplo, que usted es una persona que recién se enfrenta al mercado laboral y su experiencia en el mismo es semejante a nada. La pregunta que se harán sin duda tanto usted como los entrevistadores de selección de personal será ¿Qué cualidades y competencias valiosas puede aportar para su futuro empleador? ¿Tengo algunas condiciones naturales que puedo aprovechar mejor? O bien ¿Qué aspectos míos pueden estar dificultándome la muchas veces tortuosa búsqueda de empleo?

Pues bien, a través del auto análisis Grafológico, usted puede realizar un exhaustivo inventario de sus propias fortalezas y debilidades antes de presentarse a una entrevista laboral. De esta forma usted puede asegurar con seguridad y precisión cuáles pueden ser sus aportes al cargo ofrecido y cuáles son sus debilidades (Las que obviamente no deben ser mencionadas en la entrevista a menos que se lo pregunten, y si se mencionan siempre deben dar la impresión de que usted puede controlarlas y superarlas). Así, usted puede afirmar con la certeza de un buen vendedor que conoce a cabalidad su producto, que usted cuenta con condiciones de liderazgo, gran estabilidad emocional, capacidad de negociación, de venta, tolerancia a la frustración, autonomía, etc.
La Grafología puede ayudarlo a reconocer en sí mismo estas capacidades, lo que constituye el primer paso para poder ofrecerlas en una entrevista de trabajo, y sacarles más partido para tener éxito en su vida laboral.


Conocimiento de asesoras del hogar

Si usted es jefa o jefe de hogar, contar con la Grafología puede serle de gran utilidad a la hora de contratar con mayor seguridad a una asesora del hogar, teniendo un filtro más preciso que la intuición. Esta técnica puede ayudarlo(a) a reconocer que la anónima candidata se trata de una persona confiable, y que no sólo cumplirá eficientemente con su labor, sino que además tratará con respeto y cuidado a su familia.

Así, al averiguar cómo anda el control de impulsos y el manejo de la agresividad en la letra de una potencial asesora del hogar, puede reducirse considerablemente el riesgo de que suceda un desagradable accidente o de que se repita la desgraciada situación tan común en estos días, de que esta persona maltrate física o verbalmente a sus hijos pequeños.


Conocimiento de sus hijos

Supongamos que uno de sus hijos adolescentes se encuentra atravesando por un período difícil, y usted, por el hermetismo característico de esta edad, no consigue sacarle palabra. Usted se preocupa por él pero no sabe cómo abordarlo ¿No sería interesante poder tener una vía para estar al tanto de lo que le pasa?

Muchas veces los adolescentes desean su espacio y son celosos de él, por lo que es recomendable no invadir exageradamente su privacidad. Pero muchas veces, puede ser necesario un abordaje menos amenazante para acercase y descartar que tras ese mutismo y esa rebeldía, a ratos desesperantes, no se esconda una depresión juvenil, una desilusión amorosa o simplemente un llamado de atención que lo único que espera es a alguien que se dé cuenta. En estos casos la Grafología puede hacer un valioso aporte para conocer el estado de ánimo del adolescente o del niño, su necesidad de afecto, la forma que tiene para expresarlo, su forma de relacionarse, etc.


Conocimiento de sus alumnos

Si usted es profesor u orientador en un colegio ¿No sería la Grafología una herramienta invaluable para poder conocer a sus alumnos y saber cómo aproximarse a ellos? ¿Saber por cómo escriben en sus cuadernos en qué andan, qué los motiva, qué los aproblema?

La Grafología permite que un estudiante, de ser una cara anónima y silenciosa entre otras 30 o 40, pueda adquirir una individualidad completamente reconocible y comprensible para su profesor. Sus llamadas de ayuda se evidencian y la aparente nebulosa de su personalidad se transforma en un cristal diáfano que puede conducirnos a un mejor entendimiento de su conducta en el aula. Y también alertarnos en caso de que esté en peligro de caer en una depresión, o en una drogadicción.

El conocimiento profundo que otorga la Grafología, le permite al pedagogo no sólo identificar los principales rasgos de la personalidad del niño o del adolescente, sino que además permite aventurar incluso cómo es la relación con sus padres, que por lo general es la causa profunda de su conducta en el colegio, sea esta intachable o reprochable.

En muchos de estos casos, la Grafología ayuda nada más que como un punto de entrada para iniciar una conversación con él o con su familia. Pero es una ventana a la intimidad del alumno que muchas veces no se nos presenta tan claramente de forma natural.


Conocimiento de su entorno laboral y desarrollo profesional

Si usted trabaja con más personas o tiene un cargo de jefatura ¿No sería valioso conocer los diferentes estilos y motivaciones de cada uno de los integrantes de su equipo? ¿Podría ayudarlo a conseguir una mejor convivencia con ellos? ¿Podría liderar a personas muy distintas a usted con mayor eficacia?

Son muchísimas preguntas las que nos hacemos respecto a la conducta de los otros en nuestro entorno laboral: ¿Cuántas veces no se habrá preguntado a sí mismo ¿Qué factores debo considerar a la hora de hablarle a esta persona que puede ser mi subordinado o el Gerente General? ¿Cómo hago para conocer a mi jefe directo y lograr que tome más en cuenta mis esfuerzos? ¿Cómo puedo profundizar la relación con mis clientes? Todas esas preguntas pueden ser perfectamente respondidas con una ojeada a una nota manuscrita de la persona en cuestión.

Sin embargo, en este contexto la Grafología debe ser utilizada con sumo tacto y cuidado. A nadie le agrada que otra persona sepa de asuntos personales sin su permiso, y la violación del espacio privado resulta no sólo desagradable, sino que altamente amenazante para cualquiera. No se trata de aprovechar las reuniones de directorio o eventos sociales para impresionar a los Gerentes con lo mucho que podemos saber de ellos tan sólo mirando sus firmas. Lo que más probablemente encontraríamos no sería su agrado, sino un profundo recelo, marginación de toda reunión en que se escriba en un pizarrón y finalmente la puerta de salida de la empresa. El mismo respeto se merecen nuestros subordinados, si usamos la Grafología como una amenaza perderemos su confianza, su motivación y sus deseos de trabajar con nosotros.

No obstante lo anterior, prohibir el uso de la Grafología para conocer a quienes conforman el entorno laboral sería casi como prohibirle a la gente que se fije en el lenguaje no verbal de las demás personas.

Pero como toda técnica psicológica, el buen uso de la Grafología requiere de una gran cuota de criterio, discreción y respeto por el otro para que sus efectos no sean opuestos a los que deseamos, o resulte en actos reñidos con la ética si es que se usa a la Grafología para perjudicar a los demás.


Grafología y deporte

Si usted es deportista o tiene a cargo a pequeños deportistas, y algo de su forma de ser o de sus personalidades en formación se han transformado en verdaderos karmas que dificultan el acceso a mejores niveles de competitividad; en esta antigua técnica usted puede encontrar una herramienta de gran utilidad para establecer posibles causas y caminos de superación.

Generalmente, en todos estos casos de superación personal o de superación de los otros vale la pena destacar que, sea usted un deportista que aspira a la elite, un ejecutivo que desea alcanzar un puesto y una remuneración más importantes, o una persona común y corriente que desea mayores niveles de satisfacción consigo misma, muchas veces puede paralizarle una desesperanzada situación de “Qué le voy a hacer, si yo ya soy así y esto de la Grafología no hace sino confirmarme que no tengo arreglo”.
Quienes afirman esto están entendiendo, ya por desconocimiento o por pesimismo, a la psique humana como una cualidad estática - determinista, no transformable por medio de la fuerza de voluntad.

Similarmente, una Grafología superficial también puede parecer determinista. Un mal Grafólogo puede llegar a afirmar que usted posee tales o cuales rasgos, tal capacidad intelectual, y convencerlo de que eso es lo que hay y de que no existe posibilidad alguna de cambiar.

Sin embargo, la verdadera Grafología, que adhiere a los postulados de la Ciencia y que entiende a la psique como un organismo vivo y dinámico, no puede encontrarse más lejos de tales preconcepciones. Así como la letra cambia y evoluciona a lo largo de la vida al igual que la personalidad de su autor, éste, al darse cuenta de las características de su grafismo puede darse cuenta del problema que lo aqueja y lógicamente hacer algo para superarlo.

Ahora bien, usted podrá afirmar, con mucha razón, que reconocer el problema no necesariamente lo soluciona. Sin embargo y como observa agudamente el teórico norteamericano Allan Watts: “Quienes se preguntan qué hacer al respecto es que no han entendido el problema. Descubrir la solución a un problema y saber qué hacer al respecto son una y la misma cosa.”

Reconocer, mediante la Grafología aquello que nos aproblema, puede señalarnos un sendero expedito para descubrir qué podemos cambiar de nosotros mismos.

La Grafología abre sus puertas generosamente a todos y no sólo a los expertos. Unas nociones elementales ya ayudan al propósito fundamental de conocerse a sí mismo y al otro en mayor profundidad y, por lo general, motivan a seguir adelante con su estudio y perfeccionamiento.

La invitación está hecha, usted decide si recogerla o no.

No hay comentarios:

Publicar un comentario